Viajes

La ciudad es un lugar muy tradicional y dejando de lado los templos y pagodas que es a lo que el turismo llega a esta lugar, si tienes tiempo y puedes conocer la ciudad te encantará.  Su calle principal se llama Odawara y es una buena opción recorrerla porque aquí encontrarás muchas tiendas locales, restaurantes, también templos y te recomiendo que pruebes los yakimochi, unos pastelitos de arroz que se cocinan tradicionalmente a la parrilla y son deliciosos.

Es un lugar totalmente tradicional y las casas de los habitantes también son totalmente tradicionales.  En cuanto a su gente con una gran calidez y a pesar del idioma que no es una barrera, su gente es muy educada –como sempre lo han sido y lo siguen siendo los japones– respetuosa y con un enorme orgullo su origen y mostrándote todo lo que tienen y que nos pueden aportar de su cultura milenaria.

También es muy normal pero para el turismo si es sorprendente encontrarte con monjes por toda la ciudad, y más considerando que es una tierra budista, al final nosotros somos los extraños en su estilo de vida.  Es un lugar para gozar de los espacios libres, de la naturaleza, de la gente, de los rezos budistas… en fin, encontrarás muchas actividades pero la principal es poder disfrutar de la paz, serenidad y tranquilidad que te ofrece!