La tabernas son un deleite gastronómico para todo turista y lo que abunda en Barcelona definitivamente son estos lugares con sus clásicas tapas y cervezas. Pues bien, saliendo de la catedral encontrarás este maravillo lugar para comer y pasar una rica tarde. Es un lugar muy agradable, y está ubicado a un costado de la Catedral, en el barrio gótico (Léase Post El Barrio Gótico de Barcelona). Y aunque fue casi por accidente, nos sorprendimos del ambiente del lugar.
Es un restaurante de decoración parisina con amplios salones y terraza con vista a la catedral. Nosotros elegimos sentarnos en un gabinete en lugar de mesa y es muy cómodo tanto los lugares como el restaurante en sí. Su gastronomía es mediterránea que cuenta además con la ventaja de tener cocina abierta de manera ininterrumpida así como una amplia carta de vinos. Además, el comensal puede disfrutar de una gran variedad de tapas calientes y frías, así como de una deliciosa paella.
Pedimos la típica pizza italiana, una ensalada y un buen cabernet. La armonía de los sabores es deliciosa. Entre platos y bebidas pasamos una rica tarde, en un ambiente armonioso y estoy segura que de volver a regresar, repetiría en esta taberna. Un deleite para el paladar!!