Así como lo lees, es un balance perfecto de sabores y su cocina es una fusión entre lo local de la región con lo mexicano y lo internacional. El diseño del exterior llama mucho la atención y con la figura del maíz definitivamente te invita a entrar. Una vez que o haces el concepto del lugar es muy atractivo aparte de que te invita a relajarte y disfrutar de la pasividad de los árboles y más que es un lugar abierto.
Te sorprenderá que es no es un restaurante tradicional. Así como lo lees, una vez que te asignan mesa, la señorita que te atiende te menciona que no cuentan con carta; pero que tienen tres platos fuertes por día para tu elección. Exacto, cada día realizan 3 platos que son los que ofrecen y la verdad, no necesitas más porque la opción que elijas será un deleite para tu paladar. Nuestra elección fue un spaguetti con camarones en salsa de nuez y unas enmoladas de zapote, totalmente deliciosas con un sabor exquisito. Y como postre elegimos un panna cota y la verdad muy deliciosa.
Algo que nos llamó mucho la atención y que se nos hizo muy original fue que la vajilla que utilizan básicamente es la clásica vajilla de peltre de los años 90’s. El plato fuerte lo sirven en un comal que básicamente todos los mexicanos tenemos en nuestra cocina pero para calentar las tortillas! Pero realmente es muy atractivo ver tu comida en un comal! Una idea mucho muy original que en lo personal me encantó! Por este motivo y por otros como su mobiliario es lo que hacen de este lugar un atractivo restaurante porque sin grandes pretensiones, hacen que te sientas muy a gusto y si a eso un buen servicio, una buena vajilla de peltre muy original y su sazón es muy exquisito… no necesitas más para disfrutar de una buena tarde y un buen plato! Así es que no dejes de visitarlo! Te encantará!
Amajac, Col. Santa Mónica, Malinalco, C.P. 52440, Edo. de México