Viajes

La cocina austriaca ess muy difícil de identificar gracias a las infliuencias culturales de su pasado tan convulso y excitante, por lo que cuentan con una combinación tan variada de alimentos de otros países que fueron marcando su pasado como lo fue el Imperio austrohúngaro, dando como resultado una excelente gastronomía de toda esta cultural europea.

Wiener Schnitzel… el escalope vienés que van cubiertos de pan rallado y acompañados de las clásicas papas al perejil y arroz blanco –conocido por nuestra cultura como la típica milanesa de res, que obviamente no hay comparación en sabor– y que aqúi la preparan con una ternera estilo escalope y aunque se dice fácil esta receta, pero es toda una institución en esta cocina austriaca; o la clásica salchicha que no puede faltar, entra tantas otras especialiades con las que cuentan.

Y no podía faltar dentro de lo dulce el clásico strudel de manzana que es toda una institución, obviamente tenía que perdila para saber de lo que estábamos hablando y sí, definitivamente no se compara con la que preparo o la que pides en algún restaurante.  El strudel de aquí es totalmente delicioso, es un verdadero paladar; aunque sobre decir que tienen una gran variedad de dulces de todo tipo y galletas que también es otra de sus especialidades. 

Antes de que se me olvide, y que no deben dejar pasar es entrar a una cafetería.  La cultura de las cafeterías vienesas es única, siempre encontrarás un muy buen café y si eres amante de este sabor como yo, amarás sus cafeterías, o un melange –café con leche–, un verlängerter –que es un café largo– y con un buen strudel o cualquier rebanada de pastel o tarta que es lo que te ofrecen y sino, solo, pero acompañado de una mini-galleta que siempre te pondrán para disfrutar de tu delicioso café; que por cierto, siempre te pondrán al lado del café un vaso con agua potable (Léase Post Austria… el reino del agua en Intro Europa… el Viejo Continente).

Eso sí, es muy normal encontrarte con gente que toma su café y leyendo el periódico.  Es más, son tan únicas y acertivas estas cafeterías que la UNESCO declaró Patrimonio Mundial Inmaterial en el 2011 a todas las cafeterías vienesas.  Qué tal!