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Ubicado desde lo alto en una elevada colina con vista a toda la ciudad junto a las aguas del famoso Danubio y si estás ubicado en cualquier parte puedes admirarlo porque a distancia impone su tamaño y majestuosidad y conforme te vas acercando vas admirando su belleza con sus cuatro torres en cada esquina.  Fue erigido en el siglo X que datan de la Edad de Piedra el casco antiguo como sus primeros asentamientos y posteriormente fue habitado por celtas, romanos y eslavos.  Sin embargo, ha sido ampliado y renovado en muchísimas ocasiones desde entonces hasta la actualidad; una vez que ingresas al recinto encontrarás diversos elementos entre renacentistas, góticos y barrocos.

En su interior alberga varias colecciones del Museo Nacional como el Museo de Historia, el Tesoro de Eslovaquia y el Museo de la Música; entre ellas, una muestra donde destacan varias salas como lo son la Torre de la Corona, con la réplica de la corona de los reyes húngaros y numerosas exposiciones sobre el proceso de reconstruccipón del castillo; la historia de Eslovaquia, los celtas de Bratislava o vestimentas y objetos de la época.

El edificio del castillo incluye cuatro torres –una en cada esquina– y un patio con un pozo de agua de 80 mts. de profundidad que data del año 1437, la Torre de las Coronas que es la parte más antigua que se conserva del castillo y desde ahí puedes tener una vista impresionante de la ciudad.  Si te ubicas en la puerta principal e inmediatamente detrás de ella podrás apreciar un Portal de Entrada con una pequeña puerta de acceso del siglo XV.  Detrás de la entrada principal hay un pasillo que conduce a una gran escalera barroca que ye lleva a las exposiciones ya mencionadas.

El ala occidental es la más larga porque fue construida para impedir el bombardeo de los demás flancos del castillo por lo que el muro exterior tiene un grosor de 7.5 mts., una ventana en la fachada oriental esconde los restos de una capilla y oratorio de mediados del siglo XIV.  Sobre el fozo de la terraza fue levantado una robusta fortificación en forma de U, donde se situaron los establos, la cocina y los aposentos del servicio, el patio fue utilizado como escuela de equitación y en el extenso espacio de la terraza norte, María Teresa hizo construir una gran terraza ajardinada al estilo francés y ante el palacio principal fue levantado un pabellón ajardinado y un hipódromo cubierto.

También cuenta con otros edificios como los restos de una basílica de esa época, así como otras construciones, el edificio de las caballerizas del siglo XVIII, que fue una de las pocas partes del castillo que no fue destruida durante el incendio de 1811 y que hoy en día resalta su precioso interior con columnas y bóvedas y que en la actualidad se utiliza como un elegante restaurante. 

Cada año, durante la celebración del Verano Cultural, se llevan a cabo numerosos eventos en el patio del castillo, entre ellos representaciones de las obras de Shakespeare con el magnífico telón de fondo del castillo, así como conciertos de música clásica y de órgano y en la capilla conciertos de cámara con composiciones de Mozart.  Así es que si tienes la oportunidad de viajar en estas fechas puedes disfrutar de este tipo de eventos y si lo haces en epoca navideña de una muestra artesanal que también disfrutarás.  No dejes de conocerlo porque es de lo más representativo en esta preciosa ciudad.

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