Viajes

Este post es para escribir de algo que jamás me imaginé hacerlo y mucho menos dejarlo por escrito.  Pero antes de empezar a escribir y me siga de filo, pido una disculpa porque en primer lugar lo escribo para que tengan conocimiento los lectores y es sin el afán de querer ofender o molestar a ninguna cultura con este tipo de post.

Una cosa es leer lo que te espera y otra cosa es vivirlo.  Pues bien, el tema es:  el Fascinante Mundo de los inodoros asiáticos o mejor dicho letrinas en algunos casos, el lugar más visitado de cualquier viajero occidental y estoy segurísima de que habrá muchos interesados en un tema tan peculiar como es este y mucho más si eres una mujer.

No sé tú caso, pero el mío es muy específico para ir al baño.  En un viaje de 3 horas evito ir al baño del avión.  Paso antes de abordar y al llegar al destino es lo primero que hago:  ir al baño.  En un viaje largo de más de 6 hrs y en este caso de 14 hrs. sé que deberé visitarlo por lo menos 5 veces y trato de estar tranquila ante esta situación porque estamos hablando de higiene personal.  Ok, después de estas 14 horas de viaje y haber pasado Migración y recoger maletas lo primero que quiero es ir al baño.  Y aquí empezó toda esta historia entre un país y otro; claro, me dejó mucho aprendizaje de limpieza y pulcritud en cada lugar.  Iniciemos este fascinante recorrido.

La tradicional Letrina de China

Tocando tierra lo primero que hice como siempre es ir al baño inmediatamente.  Mi sorpresa fue encontrarme con un “dibujito” literal un “dibujito” en cada puerta que ni atención puse por la velocidad que llevaba por llegar.  Al abrir la puerta y toparme con una letrina no lo entendí, abro otra puerta y recuerdo el artículo que había leído, abro otra puerta y lo mismo, abro otra y diferente:  había un inodoro… lo amé en ese momento.

 

Lo que en inglés se conoce como toilet y se traduce como “baño en cuclillas”.

Nosotros tan acostumbrados a sentarnos en un trono o mejor conocido como “el lugar” y leer tranquilamente el diario, la revista, u hoy en día conectarse al FB para saber que están haciendo los amigos o dedicarlo para enviar los WA personales que no puedes hacer en horario laboral.

Este “lugar” o trono forma parte de nuestra vida cotidiana y que es básico y no le das la importancia que en este continente la tiene.

No conozco una palabra oficial, algunos lo llaman baño, toilet, excusado, tocador, wáter, voy a la pipi, bathroom, el trono, lavatorio, retrete, etcétera; pero el punto es que el retrete o letrina más común en China es un hoyo en el piso o en la tierra en el que uno no se puede sentar sino que se usa la posición de cuclillas. Hay varias formas, algunos son ovalados o rectangulares, algunos de manera elevada con un escalón, otros con ligero borde para evitar salpicaduras, algunos con ciertos patrones acanalados a los lados para afirmar los pies y evitar resbalones, algunos son de porcelana, otros de metal y así sus formas son diferentes; pero la esencia es la misma, no tiene asiento y por lo tanto su uso es agachado o en cuclillas.  Esta letrina viene acompañada de un bote para la basura, pero… SIN PAPEL HIGIÉNICO… exacto, hay bote, pero no hay papel higiénico, porque después con el uso me enteré, que todos cargan su papel higiénico en su bolsa personal.  No sé en el caso de los hombres, pero las mujeres cargan su rollo de papel higiénico, que aparte, son rollos pequeños no como los de México.

 

Lo que sí es un hecho, es que en China hay baños públicos por todos lados y en cualquier momento que necesites uno, ahí lo encontrarás; caso contrario en México, que no hay muchas opciones.  Lo que sí, es raro que te encuentres un baño sucio, normalmente son gratuitos y están impecablemente limpios; pero… NO tienen puerta… exacto, normalmente no la hay, y si la hay las chinas no tienes problema o pendiente en cerrar la puerta, es muy normal que la dejen abierta.

En todos los aeropuertos y centros comerciales, encontrarás 3 tipos de baños que son:  las letrinas que son la mayoría, los inodoros normales para turistas (que son los nuestros) que son pocos y los baños para personas con discapacidad (que por cierto fueron mi adoración no aquí, sino en las provincias. Un párrafo más y les explico.) que normalmente son uno o dos.

En las provincias, aeropuertos locales y baños públicos encontrarás 2 tipos de baño (y en ocasiones 3) que son:  las letrinas que son todos y un baño para personas con discapacidad y en algunas ocasiones un baño familiar.  ¡Ahora entienden por qué los amé?  Son los baños que normalmente conocemos que hay en México:  inodoro con barras a los lados.  Y el baño familiar incluye el mismo inodoro con barras y un inodoro pequeño para niños y barra para bebés.  Bueno, cuando descubrí que existían estos baños me volví fan de ellos porque podía evitar las letrinas. 

Aparte, como en México es también en China y otros países, filas para poder entrar a los baños de mujeres, cosa que no sucede en los baños de los hombres; y normalmente, el baño para personas con discapacidad o baño familiar siempre están vacíos.  Si algo tiene la cultura china es que respetan y no ocupan estos baños, aunque ya sientan la presión de entrar a uno.

 

Claro, 5 semanas posteriores, también comprendí por qué no usan esos baños, porque simplemente es una cuestión cultural al percatarme que empleadas en el Aeropuerto Internacional de Shanghái que tiene varios baños para turista y que las letrinas estaban ocupadas, preferían formarse y esperar turno para entrar a las letrinas.  Es importante mencionar que la mayoría de los baños públicos cuentan con señalización o dibujos para los chinos donde indican cómo se usa el inodoro haciendo el comparativo de cómo se usa la letrina porque la mayoría de los chinos si usan el inodoro “suben” los pies en lugar de sentarse y cuando el turista entra, es importante revisar que el inodoro esté limpio porque es normal que esta situación suceda.

Pero aquí no termina todo.  En mi andar por todos los baños, les debo platicar que estando en Shanghái nos tocó la celebración del año Nuevo, el año del Perro, y obviamente llega mucha gente de provincia para estas celebraciones y en mi andar por las calles donde se celebraba descubrí 2 cositas adicionales sobre lo mismo:  que los niños en sus pantaloncitos tienen un agujero que recorre toda la entrepierna, y que lleva por nombre “kaidangku”, y tiene por objetivo facilitar la expulsión de desechos sólidos y líquidos. Y las niñas, solo se levantan el vestidito, bajan su ropa interior y hacen exactamente lo mismo que los niños.  NO usan pañales y, por ende, muy pronto, comprendí que es muy normal ver estos hábitos en la calle, ya sea en la coladera, en la orilla de la banqueta.  Desconozco si es una cuestión tradicional o cómoda tanto para los niños como para los papás el no usar pañales, o si es para desde pequeños educarlos precisamente a no usarlos y aprendan muy pronto a saber usar la vejiga.  Sin embargo, sí es impactante ver la ropita de los niños y el hábito que tienen.

Bueno, después de este extenso post, definitivamente debo confesar que las letrinas no son para mí.  Pido una disculpa por ser tan sincera y decirlo abiertamente, fue lo único que no pude controlar por mi andar en China.  Tan fue así, que como buena diabética tomo mucha agua durante el día, bueno, en este andar por tierras chinas dejé de hacerlo para no sufrir al entrar a un baño público y que no hubiera baño para personas con discapacidad podía alterarme emocionalmente y trataba de regularizar mi agua bebiéndola de noche en la habitación del hotel sabiendo que tenía un baño para mi solita durante toda la noche. 

Los inodoros inteligentes de Japón

El tema del baño en Japón es extremadamente importante, ya sean los baños de ducha como los baños de retrete o inodoro, considerando que desde hace décadas Japón ha sido uno de los países con mayor tecnología comparándolo con otros y es un país con demasiada creatividad, innovación e ideas y que todo lo llevan al cabo.  Pero hoy lo que nos atañe son los baños de retrete, esto quiere decir el desarrollo de inodoros electrónicos o con la mayor tecnología que he visto y repleta de funciones que van mucho más allá de un simple retrete.  El inodoro japonés no tiene absolutamente nada que ver con el inodoro occidental.  Son una maravilla en su tecnología y son todo un proceso para utilizarlos.  Cuando lo haces por primera vez, considera tiempo para leer, entender y probarlo antes de usarlo.  ¡Te encantarán!

A primera vista no llaman la atención porque es un inodoro normal, pero una vez adentro, te encontrarás con una botonera, ya sea pegada al inodoro o como una pieza adicional pero pegada en la pared.  Y aquí es donde la curiosidad mató al gato, porque por mucha prisa que lleves, terminas viendo cómo son sus funciones y obvio aprendiendo a usarlas.  Son una maravilla porque te encontrarás a diferencia de los inodoros occidentales con muchas funciones de acuerdo a su modelo o lugar.

La mayoría de estos baños cuentan con los siguientes servicios:

• Función para subir la tapa y bajar la tapa antes y después de usarlo
• Función para subir y bajar el rodete o asiento antes y después de usarlo
• Calefacción
• Sistema de eliminación de olores: con un ventilador y un conversor catalítico.
• Chorro de agua templada: con temperatura y presión ajustable
• Secado con aire templado
• Nebulizador automático: se activa con el acercamiento del usuario.
• Control remoto para spray y otras funciones
• Limpieza automática
• Solución antibacteriana
• Función de enema
• Luz LED nocturna
• Lavado masculino/femenino
• Opciones para niños
• Ahorro de energía
• Música en algunos casos para ambientar el baño
• Papel higiénico.  Para gente como yo si hay papel higiénico sino te interesa usar alguna de estas funciones, pero también tienen su propia canastilla para que pongas el papel sucio.
• Boquilla que emerge para emitir el chorro limpiador (hay una para el usuario y otra para limpiar el inodoro). Esta boquilla jamás toca al usuario y tiene su propio sistema de auto-limpieza tras cada uso, y el usuario elige con el control de botones qué zona quiere lavarse.

Este tipo de baños los encontrarás en los aeropuertos, centros comerciales, restaurantes y los lugares más populares y visitados por el turista.  Los baños públicos que hay en las calles la mayoría son más sencillos o normales.  Lo que sí es un hecho, es que te encontrarás baños por todas partes y normalmente en la calle son gratuitos y perfectamente limpios y cada vez que los uses, ya sea una máquina, el propio inodoro o una persona responsable le darán el mantenimiento para que el siguiente usuario lo encuentre como tú lo encontraste al entrar.  Definitivamente, son una cultura extremadamente pulcra y limpia.

La peculiar limpieza en los inodoros de Tailandia y Malasia

Aquí como en China encontrarás letrinas de diferentes materiales igual que en China, pero también encontrarás inodoros en menor cantidad que las letrinas, pero los habrá.  A diferencia de China, tanto las letrinas como los inodoros tienen primero, una pistola de agua que se encuentra cerca del retrete y la presión del agua es suficiente para “mojar” correctamente la zona, mucho más que con tan solo papel higiénico (que por cierto no hay en ningún baño público, solo en aeropuertos, restaurantes y centros comerciales podrás encontrar tanto la pistola de agua como el papel higiénico) y dos, el calentador de agua eléctrico que está al lado del inodoro o de la pistola de agua; se enciende, se ajusta la temperatura y en segundos el agua sale caliente.

Referente al papel higiénico, definitivamente en ambos países no se usa.  Lo normal es limpiarse con esta pistola de agua, y generalmente utilizan la mano izquierda (que por cierto se saludan únicamente con la mano derecha por higiene y cultura).  En los baños de aeropuertos, centros comerciales, restaurantes y hoteles normalmente es el inodoro, la pistola de agua, papel higiénico para el turista y el bote para la basura.  En baños públicos pueden encontrar ya sea la pistola de agua o bien una manguera y no hay bote para la basura por obvias razones y el uso del baño te lo cobrarán, no son gratuitos y no hay papel.

Y para finalizar, te dejo con toda esta maravilla que me tocó vivir en cada lugar y que definitivamente, me dejó con ganas de volver a regresar y por supuesto, si la vida nos lo permite, claro que lo seguiremos haciendo con gran placer y “tocar” los lugares que por tiempo no pudimos visitar.