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Gracias a sus tres grandes fronteras, la gastronomía de Luxemburgo es una fusión entre la cultura francesa, la alemana y la belga; y esto hace un verdadero festín el poder degustar de esta mezcla de sabores, claro, sin dejar de lado que también cuenta con numerosas especialidades culinarias locales.  Entre sus platos tradicionales encontramos los más representativos:

Bouneschlupp que es una deliciosa sopa tradicional elaborada con judías verdes, cebollas, verdudas y tocino servido en invierno; Judd mat gaardebounenen que es un platillo a case de cuello e cerdo ahumado y habas; Kiddelfleck que es un plato a base de tripas o estómago de la ternera y los trozos se empana y se fríen y van servidos con salsa de tomate.

Hablar de Luxemburgo también es hablar de la charcutería debido a su gran calidad ahumada a la región de Ardenas, sus patés famosos en todo el mundo, así como su jamón curado que hace de su gastronomía un deleita para el paladar.

Cuando pensamos en vinos europeos, generalmente se nos viene a la cabeza los vinos italianos, franceses o españoles, inclusive hasta los alemanes, pero jamás pensarías en los vinos luxemburgueses.  La región de Mosela o Moselle produce vinos excepcionales como el Crémant de Luxemburgo que es un espumoso que lo puedes pedir en rosado o blanco y que inclusive; a lo largo de los siglos, el vino del Mosela se ha ganado numerosos premios y un verdadero reconocimiento a nivel internacional.  También encontrarás vinos blancos tranquilos y que por el suelo calcáreo de este valle ofrece una mineralidad propicia para estos vinos.  No dudes en elegir uno de estos vinos para acompañar alguna especialidad luxemburguesa para disfrutar al 100% el platillo elegido y hacer de esto un gran acompañamiento culinario.

Otro deleite para tu paladar son las cervezas luxemburguesas que en 1970, la oferta de la cerveza era enorme y contaban con nueve fábricas en el Gran Ducado, hoy en día solo existen seis fábricas pero son muy conocidas sus marcas por ser de las mejores que hay como la Bofferding.  Así es que también no dejes de probarlas, porque será una buena elección para acompañar tu platillo. 

En cuanto al café y el chocolate existe una gran cultura de consumo de estos productos, pero eso sí los tienen que importar de otros países.  En la ciudad existen muchas cafeterías de café gourmet y por supuesto el chocolate, que es una delicia al paladar.

¿Y dónde cómer? encontrarás una gran variedad de restaurantes, cafeterías, pubs, donde puedas degustar de una deliciosa cena acompañada de un buen vino luxemburgués o bien, una deliciosa cerveza.  Eso sí, todo un verdadero festín para los amantes de la buena comida!